Manush Romanov (1927-2004) fue un destacado activista y compositor gitano, fallecido en Turquía en 2004. Nacido en Sofía, Bulgaria, en 1927 con el nombre de Mustafa Aliev, provenía de una familia romaní musulmana. Romanov desempeñó roles diversos a lo largo de su vida, incluyendo el de parlamentario, editor del periódico Nevo Drom (Nuevo Camino, en romanó) y director del Roma Theatre. Su legado como figura esencial en la tradición crítica política romaní perdura hasta hoy.
«Enterradme de pie» es la síntesis perfecta de la rebeldía vitalista que vertebra la resistencia romaní. A menudo, como herencia del aparato antropológico convencional, se ha querido caracterizar a los romaníes como un pueblo ‘bohemio’, ‘orgulloso’ apegado a la ‘libertad’. Estas categorías se convierten entonces en marcadores raciales que caricaturizan la cosmovisión romaní convirtiéndola en un producto de consumo para el mundo del arte. Como siempre, se trata de una manipulación edulcorada de la heterogénea realidad gitana que convierte formas de organización comunitaria y política en rasgos esencialistas de pueblos considerados herméticos y enigmáticos. Manush Romanov dijo “enterradme de pie”, para concluir con “llevo toda mi vida de rodillas”. Esta segunda sentencia refleja la amargura de una cruda realidad: siglos de opresión en Europa y el resto del mundo. Los romaníes no son esencialmente rebeldes, sino que tan sólo se han rebelado y rebelan, como tantos otros pueblos, ante las dinámicas institucionales y los regímenes políticos que pretenden deshumanizarlos. No hay nada más humano que el deseo y la voluntad de vivir. Es por eso que el vitalismo romanó es, esencialmente, un vitalismo humanista que funciona como vector de la cosmovisión perteneciente a un pueblo que, en condiciones hostiles, ha tenido que agarrarse con más fuerza a la propia vida.
 

«Enterradme de pie, he vivido toda mi vida de rodillas».